El próximo día 4 de marzo, se presenta en Córdoba, el libro LA SOLIDARIDAD CON EL JUEZ GARZON.
Estamos ante una obra colectiva excepcional, que demuestra el apoyo nacional e internacional recibido por el Juez Garzón, ante la persecución penal a la que está sometido por el Tribunal Supremo de España. Una obra que reúne escritos, comunicados, acuerdos, artículos, los Autos, cronología de los acontecimientos, fotografías… Una obra posible gracias al apoyo desinteresado de jueces y fiscales, catedráticos, magistrados, periodistas, fotógrafos, escritores, etc.; organizaciones nacionales e internacionales; organismos públicos; sindicatos; organizaciones cívicas, plataformas ciudadanas y foros de recuperación de la Memoria Histórica; medios de comunicación… Estas páginas reúnen a hombres y mujeres que han dado su voz en defensa pública del Juez Baltasar Garzón.

CóRDOBA SIN MEMORIA: LAS FOSAS DE LA HIPOCRESíA.
Córdoba sin memoria: las fosas de la hipocresía

04/02/2011 Ana María Pascual / Interviú.

Izquierda Unida exige que se exhumen los restos de las víctimas del franquismo en toda España, pero rechaza hacerlo en Córdoba, la única capital que gobierna, aduciendo razones económicas y jurídicas.

Juan y María Inés Raya, en la fosa del cementerio de San Rafael, donde está enterrado su padre. Antes de su inauguración, los `Muros de la Memoria´ con los que el Ayuntamiento de Córdoba pretende homenajear a los represaliados por el franquismo ya están envueltos en la polémica. Se trata de unos monolitos donde figuran los nombres de 2.400 personas ejecutadas–la mayoría, fusiladas– y enterradas en dos fosas comunes; una en el cementerio de San Rafael y la otra, en el de La Salud. Algunas familias se oponen al tributo: exigen, antes que monumentos, que se exhumen los restos de sus seres queridos.

El consistorio cordobés, gobernado por Izquierda Unida en coalición con el PSOE, se niega desde hace años a abrir las fosas, aduciendo razones económicas y jurídicas; una actitud discordante con los principios de la formación liderada por Cayo Lara. El coordinador de IU hace apenas unos meses exigió en un mitin la recuperación de los restos de los represaliados como un derecho fundamental de las víctimas. Gaspar Llamazares defendió en mayo pasado una moción en este sentido. Sin embargo, en Córdoba, única capital de provincia con un alcalde de IU, no se considera la exhumación como la principal pieza de la memoria histórica. Rosa Candelario, teniente de alcalde de Presidencia del Ayuntamiento de Córdoba, explica a Interviú que “exhumar e identificar a las tres mil y pico víctimas enterradas en las fosas es muy complejo y sería un gasto desmesurado. Las subvenciones serían insuficientes para acometer esa labor. Además hay nichos y tumbas más recientes encima de la fosa de San Rafael. ¿Qué se hacen con esos restos? No hay seguridad jurídica, de momento, para abrir las fosas”.

El Foro por la Memoria de Córdoba apoya al ayuntamiento. Luis Naranjo, vicepresidente de esta asociación, sostiene que sin un convenio entre todas las administraciones “no es posible exhumar estas fosas. Hay que tener en cuenta que la exhumación no es un derecho en sí de las familias. En todo caso, sería una obligación del Estado, no del Ayuntamiento”.

La familia del diputado socialista Luis Dorado, fusilado en 1936 por el ejército golpista, ha llevado su batalla hasta el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para que se reconozca el asesinato del político y que conste como tal en el Registro Civil; además se ha negado a que el nombre del político figure en los `Muros de la Memoria´ hasta que no se recuperen los restos de Luis Dorado. Los hijos, ya octogenarios y nonagenarios, de Luis Raya, agricultor ejecutado también en 1936, no pierden la esperanza de poder dar digna sepultura a su padre.

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